¿Enemigo del Gobierno?
POR DANILO CRUZ PICHARDO.- El Gobierno, en la práctica, es el más fuerte de todos los poderes del Estado. En la historia los casos en que el Ejecutivo no ha logrado que se aprueben sus iniciativas, desde el Congreso, se pueden calificar de excepcionales. Solo en el período 1996-2000, en el que el PLD gobernante estaba en franca minoría, quien dirigía la nación no controlaba el parlamento.
El Poder Ejecutivo controla todas las instituciones centralizadas y descentralizadas (excluyendo a la UASD, que tiene su propio gobierno), la empleomanía, el Presupuesto de la Nación, el Ministerio Público, las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, los organismos de seguridad. Controla, además, todo lo que constituya patrimonio del Estado, incluyendo las tierras y las playas.
De igual modo, los gobiernos siempre pretenden influir en la Junta Central Electoral y en la Cámara de Cuentas, a través de la selección de sus miembros en el Senado. Y mediante concursos manipulados, del Consejo Nacional de la Magistratura, procuran controlar la Suprema Corte de Justicia, el Constitucional y el Superior Electoral. Es posible que se escape algún dato.
¿Qué más poder se le puede otorgar al presidente de la República? Y para ofertar una buena imagen ante la población, el Gobierno invierte miles de millones de pesos cada año en publicidad. Dentro de ese presupuesto están todos aquellos que hablan y escriben de las “grandes bondades” del Gobierno del Cambio.
Al suscrito le atribuyen ser del PRM, pero al mismo tiempo ser enemigo del Gobierno. ¿Enemigo? De ser así entonces he sido enemigo de todos los gobiernos a pesar de no tener nada personal contra Balaguer, Leonel, Hipólito, Danilo y Abinader.
Es injusto calificar de enemigo a un comunicador que diga la verdad. ¿O no es cierto que las farmacias populares están desabastecidas, que los niveles de inseguridad han subido, que la inflación de bienes y servicios está a la vista, que aumentó la tarifa eléctrica, que los apagones bajan el nivel de vida, que se han tomado muchos préstamos y que todos los desaciertos se pretenden justificar con los gobiernos corruptos del pasado?
Este es un gobierno demasiado poderoso, que no necesita que nadie le escriba. Es preferible realizar observaciones en torno a los males del país.